Les conté una historia o anécdota de mi bisabuela paterna, bueno ahora quiero contarles una historia de mi abuela materna.
Mas adelante van a saber mas historias de algunos miembros de mi familia que quiero compartir, es un enredo, al menos la paterna que son un gran batallón, pero hay cosas interesantes, ya les contaré.
Mi abuelita materna nació en Chile en el año de 1889, un 12 de diciembre, en la Región Valparaiso, provincia Quillota, en la comuna de Hijuelas, conocida como La Capital de las Flore, por eso seguro le pusieron de nombre Hortencia y seguro a esto se deba que a mi abuelita le encantaban las plantas y tenía muy buena mano, pues todo lo que sembraba florecía.
Mi abuela era la última de tres hermanos, el mayor José María y el segundo Guillermo.
Su madre se llamaba Elisa Villegas y nos contaba que su mamá tenía el pelo bien largo, casi hasta los tobillos y que le encantaba verla cepillárselo cada noche.
Mi bisabuela murió de parto y dejó a mi abuelita Hortencia muy niña.
Su padrese llamaba Demetrio Brito, de el tenía pocos recuerdos, pues cuando enviudó se fue; ella y sus hermanos fueron criados por unos tíos.
Cuando ella tendría 12 ó 13 años, en Chile hubo una revolución, el pueblo se levantó contra el gobierno y el ejercito salió a las calles, hubieron muchos muertos, a los jóvenes los tomaban presos y tenían que huir a esconderse a otros poblados lejos de la capital donde se desató la trifulca.
Fue durante una de esas huidas de la gente, especialmente de los jóvenes, cuando ella se desliga de sus hermanos, pues estos huyeron a otros poblados, para no ser apresados y forzados a alistarse en el ejército.
Pasó el tiempo, vino la calma pero mi abuela no tenía noticias de sus hermanos y pensó que habían muerto en la revolución; e igualmente pensaban sus hermanos al no tener noticias de ella.
El tío José María se fue a vivir a Santiago con unos tíos y el tío Guillermo fue adoptado por una familia que lo acogió y se fue a vivir a San Fernando, viviendo muchos anos con la pena de haber perdido a su hermana menor.
Mi abuela se casó muy joven, nos contaba que tenía 15 cuando conoció a un peruano Benjamín García, mi abuelo. El era comerciante y había llegado a Santiago a hacer sus ventas y comprar mercadería para continuar viaje de regreso, pero al conocer a mi abuela se quedó un tiempo en Santiago.
Ahí nació el primer hijo de mi abuelita, el tío Guillermo, lo llamó así en homenaje a su hermano. Luego emprendieron viaje al Perú y en Iquique nació su segundo hijo, fue una niña, María Antonieta le pusieron de nombre.....mi mamá.
Cuando mi mamá tenía 4 años llegaron a Lima, y mi abuelita llegó para dar a luz a su tercer hijo...mi tio Victor. Después llegarían sus otros hijos, Rómulo, Hernán, Sixto e Isabel.
Fue en el año 1960, con el viaje de mi tio Guillermo y su familia a Chile, que indagan sobre el paradero de los hermanos de mi abuelita y oh sorpresa, los tíos vivían, fue una noticia muy importante y un encuentro muy agradable para toda la familia de saber que estos tíos vivían, la mas feliz fue mi abuelita Hortencia que veía a su hermano después de 60 años, toda una larga vida.
No pasó mucho tiempo y el hermano Guillermo, de mi abuelita, vino a reencontrarse con su hermana.
Se pasaban horas de horas conversando y recordando.
El tio abuelo Guillermo era un tipo muy agradable, muy parecido a mi abuelita, no se podía negar que fueran hermanos, el nos enseñó a jugar Dominó, y nos dejó uno de recuerdo. Me acuerdo que trataba de llegar lo mas pronto del colegio para no perderme los cuentos e historias que contaba, tanto de él como de su familia.
Mi mamá pudo conocer a todos sus primos, cinco por parte de su tio José María y 2 por parte de su tio Guillermo.
El tío abuelo José María no pudo venir al Perú a re encontrarse con su hermana, el murió casi al año del re encuentro, lo sorprendió un paro cardiaco; y según contaba mi abuelita Hortencia, ella vio a su hermano José María venir a despedirse el día de su muerte, contaba que lo había visto al pie de su cama y que ella presintió antes de que le avisaran de su muerte.
Cosas de la sangre, del amor y de lo que tenemos en nuestra memoria y corazón, yo si le creí, por que también he experimentado esas cosas,..... pero esa es otra historia.