martes, 12 de marzo de 2013

Mis Queridos Padres. - Tercera Parte

En esta Tercera Parte les quiero contar como se conocen mis padres y lo que resulta de todo ello, y ya sin mas preámbulo vamos al tema.

EL MATRIMONIO

Mi mamá nos contaba que salía con su tía Clotilde a dejar la ropa que confeccionaban a los comerciantes del Jr. Trujillo y a los del Jr. de La Unión, y de esas idas y venidas, mi papá ya le había ....echado el ojo ...a mi mamá y como el tenía a un amigo y compañero Guillermo, hermano de mi mamá, al cual visitaba, fue así que ellos se conocieron.
La relación de ellos no fue fácil, pues el padre de mi mamá, el abuelo Benjamín, era muy celoso, y como mi papá tenía su pinta, no lo veía como buen candidato para su querida hija.

Pero como...."el amor siempre triunfa"..., un 25 de octubre de 1941 ellos se casaron en la Iglesia de San Marcelo del centro de Lima.

Mi mamá siempre hablaba del día de su boda. Nos contaba de su vestido, el que conservó por muchos años, del velo, los zapatos, la corona que era de cera. Me acuerdo que nosotras sus hijas muchas veces nos pusimos su vestido de novia y los zapatos para jugar y corretear por toda la casa.....se imagínan.

Mis padres el día de su boda, lindos ellos.

Cuando mis padres se casaron tuvieron muchos regalos, como el gran cuadro del Corazón de Jesús que fue regalo de mi abuelita Hortencia, y que  hasta hoy existe en el lugar preferencial de la casa, la sala.
Siempre que veía a mi papá llegar del trabajo o la calle, se quitaba el sombrero y hacía una reverencia a la imagen del Corazón de Jesús, el cual les hizo muchos milagros a mis padres, pues yo los veía rezar y luego de algunos días le ponían un pequeño corazoncito de plata con cinta roja, en señal de agradecimiento por el milagro concedido.
También hasta hoy existen algunas de las dulceras y vasos que recibieron de regalo de matrimonio....se nota que eramos cuidadosos...pues así nos enseñaron.
Como también existen el juego de sala y el gran comedor de cedro de Nicaragua que con tanto cariño cuidaban mis padre y hasta ahora lo seguimos haciendo.

De lo que sí no nos hablaron fue de su "luna de miel", claro no detalles, pero no se si se fueron de viaje, o a un lugar especial, o si ya tenían su casita, mi mamá que era la que mas nos contaba sus cosas, nunca mencionó este episodio.....a lo mejor era TABÚ??.

Cuando mi mamá se casó tenía 23 años.
Al inicio no tuvo hijos, y después de cinco años y por un tratamiento pudo concebir.
El doctor que le hizo el tratamiento, que en ese entonces era el Dr.Pedro Vargas Morales (padre) médico de la familia, le dijo...."no va a reclamarme, pues una vez que tenga al primero...el resto van a venir seguidos".
I así fue, ni bien puesto en práctica el tratamiento vino su primer hijo, lindo varoncito, que por falta de atención adecuada murió.
Mi mamá era primeriza, el BB venía de pie y la partera que no llegaba por que estaba jaraneándose en una fiesta; esto nos contaba mi mamá con mucha nostalgia.
No tuvo tiempo de sumirse en la pena y ahí no más llegó su segundo hijo. Esta vez vino mi hermana Dora, su hija mayor.
Mi mamá tuvo ocho hijos, el primero murió al nacer y la que sería la quinta fue una pérdida prematura, que si hubieran los adelantos que hay hoy en día a lo mejor se hubiera logrado.

Sobre los hijos, o sea yo y mis hermanos voy a hacer un alto, pues este tema lo trataré mas adelante, y que tema señores, somos seis los hijos de este matrimonio y hay para rato.

Siguiendo con mis padres le diré que mi mamá era una perfecta ama de casa, hacía ricas comidas y postres, cuando estábamos chicas nos cosía, pero ya adolescentes lo hacía la señora Susana Sotomayor, nuestra costurera de toda la vida.
Todas las compras las hacía mi mamá, a ella le gustaba salir de compras, casi siempre yo la acompañaba y también disfrutaba de ello pues siempre hacíamos un alto y caíamos en algún restauran o fuente de soda. El que siempre visitábamos era uno que quedaba en el Jr. de La Unión llamado "Hinojosa", ahí vendían toda clase de comida criolla y la servían en platos pequeños y podías pedir 3 ó 4 tipos diferentes. Nosotros pedíamos papa rellena, ají de gallina, carapulcra, tamalitos verdes y de postre Kin Kon o leche asada, o crema volteada, o arroz zambito y llevábamos a la casa los buenos alfajores que ahí preparaban......valía la pena acompañar a mi mamá a hacer compras.
Ella compraba todo lo que hacía falta en la casa y hasta la ropa de mi papá.
Íbamos a  Klinge a comprar sábanas, toallas, la ropa del colegio; a Santa Catalina por frazadas, colchas; a Tía a comprar jabones, pasta de dientes, shampoo, cepillos, etc etc; a Anchor donde vendían ropa de caballero y ahí compraba camisas, corbatas, medias etc para mi papá; a Sears por cosas mas grandes como muebles, edredones, cubiertos, cristalería, etc;  íbamos también a la Botica Inglesa no solo por sus ricos helados, sino por remedios, su famosa colonia con la que nos peinaba para ir al cole.
Eran famosos los edredones o cubrecamas de chenill que mi mamá compraba y que lucíamos cuando había una fiesta importante en la casa como navidad, cumpleaños de mis padres, alguna reunión etc.
También visitábamos algunas veces, Cordano a disfrutar las butifarras, al restauran Raimondi por un menú con su rica chicha morada, en fin, con mi mamá conocí los buenos rincones del centro de Lima donde se podía comer rico, so pretexto de ir de compras.

Mi papá también tiene lo suyo. Cuando mi mamá daba a luz, el era el encargado de alistarnos para el colegio, nos hacia el desayuno nos peinaba.
El era el encargado de "purgarnos", pues si cada tres o cuatro meses mi papá muy gentil nos daba un vaso de gaseosa, y resulta que esa gaseos estaba mezclada con "Limonada Purgante Leonard", mas mala que maní crudo, me acuerdo de esos vasos raros bien servidos de alguna Kola, media salada con sabor bien raro.
Cuando había alguna fiesta como las de fin de año o algún cumpleaños , mi papá se encargaba de sacrificar a las aves, pavo o gallina que se iban a peparar.
El también arreglaba todos los aparatos eléctricos que se malograban, ponía repisas, hacía los gallineros para las aves que criaba mi mamá, arreglaba nuestros juguetes, era gasfitero, nos limpiaba los zapatos del colegio,  y hacía  todas esas cosas que son "trabajos de hombre", y......yo era su ayudanta.
A mi papa no le gustaba su santo, se ponía furioso si le preguntabamos que íbamos a hacer para ese día. Mi mamá a escondidas se preparaba, pues era fijo que la casa se llenaba no solo de la familia, sino de los compadres y ahijados que venían ese día y cuando veía a los convidados pues nadie los invitaba, ellos solo venían pues mi padre era muy querido, no le quedaba mas remedio que alegrarse y atender a la visita y muchas veces esas reuniones terminaban en un gran jaranón con musicos guitarristas y cajón.
Cuando mis padres cumplieron 30 años de casados, nosotros sus hijos, le celebramos sus ...Bodas de Perlas.
Le mandamos a hacer una linda misa en el colegio La Salle, yo preparé la comida, claro con la yuda de mi mamá que tuvimos que decirle faltando dos días de lo organizado con tarjetas de invitación y todo. Ella fue nuestra complice y llegado el día lo llevó a mi papá, a la iglesia, diciendole que sus hijos le habían hecho una misa de salud, pero cuando nos vió bien arregladas como el acontecimiento lo merecía, es decir vestido largo y peinado de peluquería, casi no va, pero al fin fue y no pensó en el fieston que le habíamos armado.
Con mi mamá preparamos una rica polenta, aji de gallina y en la mesa se puso un gran bufet de bocaditos y buen vino, cerveza, whisky y otros mas y de postre una rica torta de bodas mandada a hacer donde una señora repostera que se esmeró y salió deli.

Este matrimonio duró 32 lindos años, hasta que un 22 de mayo de 1973 falleció mi papá de una larga enfermedad, dejandonos en el mas grande dolor.
Pero con sus enseñanzas y los gratos momentos vividos, siempre lo recordamos con mucho cariño.

Quiciera seguir contándoles pero ya no puedo, mejor lo dejamos para otro día. Todabía queda mucho que contar.
Espero que les haya gustado
Un abrazo
Periquita.